Los desafíos de la descolonización en Bolivia
Jorge Lora Cam y Teresa González Herrera
Consideramos correcta
la herejía de Samir Amin cuando sostiene que el capitalismo siempre
ha sido imperialista o la de Braudel quien afirma que la fuerza originaria
del capitalismo viene de la asociación de príncipes y banqueros europeos
y el secreto de su crecimiento radica en los beneficios extraordinarios
de los grandes depredadores. Arrighi desarrolla esta idea y descubre
que los ciclos de acumulación son liderados por potencias hegemónicas
que en su fase de expansión financiera en medio de conflictos sociales,
coloniales o civilizatorios y guerras devastadoras configuran estructuras
y estrategias estatales que sucesivamente mantuvieron el orden político
y organizan las relaciones políticas,económicas y financieras a escala
global en función de sus necesidades.1 Por su
lado Pablo González Casanova caracteriza al imperialismo actual
de esta manera:
El
imperialismo colectivo esta organizado en complejos empresariales, militares,
políticos y mediáticos y cuenta con inmensas y variadas redes de asociados,
subordinados, asimilados, cooptados extranjeros y nacionales-
con los que domina y explota a los pobres de la tierra, a los trabajadores
y pueblos proletarios, pobres marginados y excluidos.2
Basado en ello podemos
decir que América Latina vive 5 siglos de colonización siempre dominados
por ciclos de financiarización de las economías, acompañadas de una
concepción civilizatoria que divide al mundo entre el bien y el mal,
entre civilizados y bárbaros de oriente, África y América Latina
y que les permite a los primeros con una conciencia moralmente aceptable
puedan someter, explotar, saquear, destruir, exterminar
o tratar denigrantemente a esos seres irracionales e inhumanos del mundo
de la maldad. Desde los inicios de la expansión capitalista las guerras
e invasiones protagonizadas por occidente serán autodenominadas como
civilizatorias y después humanitarias. Con los años van fijando ciertos
mitos en las cabezas de los hombres acerca de las ideologías del progreso,
la modernidad, el desarrollo, la civilización, democracia, etc. ocultando
una historia europea que viene del canibalismo y de las formas más
salvajes de explotación y dominio político. Al mismo tiempo que desechan
los aportes del republicanismo como la libertad, la justicia y solidaridad.
América Latina desde el siglo XIX ocultó tras el liberalismo un brutal
despojo sempiterno e inagotable de los recursos de sobrevivencia incluyendo
la fuerza de trabajo.
Son innumerables los
ejemplos de la muy antigua asociación de banqueros primero y capital
financiero después con el colonialismo, las guerras y múltiples formas
de violencia. Por ejemplo en un artículo de Alfredo Jalife
Rahme sostiene que:
La
excavación de los archivos de poder, como hubiera proferido Michel
Foucault, no es un asunto menor y eviscera las entrañas financieras
de los Rothschild desde las guerras napoleónicas, es decir desde hace
mas de dos siglos de su reinado ininterrumpido en la banca occidental.
Hoyos comenta que los bancos que tuvieron en el pasado vínculo con
las injusticias de la esclavitud se encuentran bajo presión para realizar
compensaciones.3
Los otros bancos a los
que coloca como ejemplos son el JP Morgan-Chase, el Royal Bank
of Scotland, Lehman Brothers y Wachovia; las aseguradoras New Cork Life
y Atená, e incluso la afamada Universidad de Yale. Holanda, Gran Bretaña
y los Estados Unidos fueron construidos con sangre esclava y el colonialismo
se mantiene hasta hoy cuando esta pequeña oligarquía se ha globalizado
con una geoestrategia de poder que ya muestra su fracaso. Sin
embargo será inevitable persistir en la remundialización capitalista,
el neoliberalismo y la financiarización de las economías. Nuevamente
son los estados nacionales los lugares políticos que rescatan
al capitalismo abonando al capital financiero y ejercen la ley
y la violencia bajo el dictado hacer guerras es nuestro destino,
como parte de una respuesta integral al declive imperial. Los golpes
de Estado y las amenazas del Comando Sur, la privatización y paramilitarización
de las guerras, la USAID, la diplomacia, la balcanización, el racismo,
la politización de las trasnacionales muestran que la descolonización
recién esta comenzando. Los gobiernos demócratas son los mas engañosos,
si hacemos memoria y solo nos referimos al Gobierno de Clinton recordaremos
que en su gestión fue que se iniciaron los bombardeos a Irak
y a Somalía (1993, luego en Serbia-Bosnia (1995), otra vez Irak, Afganistán
y Sudán (1998) y luego el Plan Colombia (2000). Ocho años después
Obama continua con la ocupación de Irak, Afganistán, amenaza a Iran
y Corea del Norte, amplia el Plan Colombia, dirige el golpe de Estado
en Honduras y aumenta el financiamiento para la contrarrevolución en
varios países que luchan por la autodeterminación como Venezuela o
Bolivia. Da inicio a un plan estratégico de recuperar su patio trasero
a través del fortalecimiento y enlazamiento de la derecha global,
el redesplegamiento de tropas del medio oriente hacia América Latina,
la intervención oficial de la OTAN e Israel en la región.
Una revisión del último
bicentenario de la llamada independencia actualiza la memoria colonial
y la lucha inconclusa de los pueblos indígenas y mestizos contra el
colonialismo. Los continuos procesos de recolonización sobre los países
andinos queda demostrada por la existencia desde hace más de
un siglo de políticas globales anglo-norteamericanas orientadas hacia
la imposición económica y política de la acumulación por desposesión
a través de un lumpen sistema financiero y sus redes criminales
conformadas por un complejo tejido de organismos financieros y multilaterales
internacionales, bancos, trasnacionales, empresarios nativos trasnacionalizados,
Estados, gobiernos e instituciones, fuerzas armadas y jerarquía eclesiástica
construidos para la opresión de países, la explotación y dominación
de los pueblos, y el genocidio y sumisión constante de los pueblos
indígenas y originarios de estas tierras. Cada vez se reiniciaba en
los países andinos y amazónicos la acumulación originaria.
En Bolivia ni la Independencia,
ni la revolución del 52, ni los efectos de la reforma agraria del 53,
ni los gobiernos progresistas en dos siglos significaron descolonización.
Con la contrarrevolución neoliberal (1985) las micro conquistas acumuladas
en distintos ordenes fueron disueltas. La recolonización en sus distintos
momentos que adoptaron la forma de saqueo y etnocidio se consolida a
través del neoliberalismo. La colonización permanente siempre se hizo
posible gracias a empresarios-gobiernos de la colonización, entreguistas
que buscaban beneficio de poderosos grupos de familias desde el s. XVI.
Pareciera que recién llegó la hora de las clases nacionales como
les llamaba Zavaleta- que construyan una nación para si mismas, que
sustituyan las semiformas estatales creadas por clases extranjeras,
refiriéndose a las plutocracias oligárquicas.
Como bien señala un
incógnito autor y ya es consenso de los historiadores, la Independencia
fue financiada por el imperialismo inglés configurando el endeudamiento,
la continuidad del saqueo y estancamiento boliviano del siglo XIX que
concluye con la guerra del Pacífico que define una nueva época de
despojo de riquezas a peruanos, bolivianos y chilenos para beneficio
de monopolios de la dupla anglosajona y unas cuantas familias nativas
de los tres países.
Efectivamente,
paralelamente a los discursos patrióticos y a las constantes amenazas
de guerra que marcaron esta época, oligarcas chilenos y bolivianos
estaban desarrollando importantes proyectos comunes. La guerra no fue
el producto de odios entre quienes se masacraron, sino que permitió,
a los poderosos de ambos países, aprovechar el pretexto de la defensa
de la soberanía de las naciones para debilitar sus economías, endeudarlas
e intensificar el saqueo de sus riquezas. 4
Para este autor las
etapas de la historia son susceptibles de ser descritas como fotografías,
es decir, como escenarios inmóviles que se suceden unos a otros. Varios
acontecimientos internacionales muestran que siempre primó el saqueo
de los recursos naturales en base a la lealtad económica entre banqueros
y funcionarios pertenecientes a las familias más poderosas del imperio
anglo-norteamericano, dos poderes globales hasta hoy, la dupla anglosajona,
la City en Londres y Wall Street en Estados Unidos (que al mismo tiempo
traficaban con armas, esclavos, drogas, criminales de guerra, contrabando
y difusión de la corrupción) y los empresarios nativo-extranjeros,
no solo frente a la soberanía y bienestar de los pueblos sino a costa
de millares de muertos por las guerras prefabricadas y los constantes
magnicidios de quienes osaban oponerse a la política imperial (Balta
y Pardo en Perú, Morales y Daza en Bolivia). El Tratado
de Paz, Amistad y Comercio en Santiago de Chile, el 15 de noviembre
de 1904 legaliza el saqueo del guano, salitre y la minería consustanciales
al atraso del siglo XX. Posteriormente la misma dupla compartía
su dominio y explotación sobre los andes, lo que expresa una vez mas
que las nuevas formas coloniales no eliminan a las formas anteriores.
Otra de las fechas claves es mayo de 1906 cuando se firma el contrato
Speyer que significó el endeudamiento en libras esterlinas con City
Bank of New York, dinero que se empleó en la construcción de
líneas de ferrocarriles de las que luego se apoderaran empresarios
privados y la deuda quedaría para Bolivia. El control que consolidaron
las trasnacionales británicas, norteamericanas y alemanas desde mediados
del siglo XIX, de los aspectos estratégicos de la reproducción de
la vida como la distribución de alimentos, intervención social con
programas etnocidas de control de la natalidad, el monopolio en la extracción,
transformación, manejo y comercio de recursos naturales, sobre todo
en esta época de valorización de los recursos minerales, de la explotación
de las minas de estaño, luego del petróleo y de otros minerales. La
Revolución de 1952 realizó cambios estructurales y
nacionalizaciones que solo reimpulsaron las políticas coloniales
norteamericanas. Mientras nacionalizaba los negocios no rentables privatizaba
los que realmente en ese nuevo momento lo eran. La farsa de la
construcción del Estado nación por esta revolución que aparentó
una ideología nacionalista también se vio obligada para legitimarse
a sacrificar a un sector terrateniente dejando intacta la minería
y la banca. Las clases nacionales como el campesinado estaban sometidas
y su desarrollo era incipiente.
La esfera del partido
MNR arrastro tras de si al campesinado durante muchos años hasta
cuando se impuso la política neoliberal que exhibió de cuerpo entero
a este partido nacionalista, fue mostrando la asimilación
del campesinado indígena pero que al mismo tiempo reconstruía sus
formas distintivas de conciencia diferente de otras por su identidad
étnica y su postura anticolonial capaz de actuar en sus propios términos
y condiciones. Sin embargo esta negatividad asociada a la comunidad
étnica y de clase, a regiones no dominadas de la conciencia,
de superación de la experiencia colonial pensando más en un mundo
al revés que en una vuelta al pasado, continuaba engarzada a la ambigüedad,
clientelismo, patrimonialismo, caciquismo, presidencialismo.
Una vez más el mismo
autor anónimo revisa los antecedentes y procedencia de los colaboradores
más cercanos de presidentes de EUA como H. Hoover, Truman, coadjutores,
que además de ser los dirigentes de varias trasnacionales, eran ex-militares
o militantes nazis que apoyaban a Hitler en su proyecto eugenésico.
Relata la manera como oficiales nazis quienes tenían cargos en su contra
por su participación en acciones antisemitas, al llegar a América
cambiaban sus nombres y apellidos para evadir la justicia y se insertaban
en los proyectos políticos y sociales del continente. Acontecimientos
importantes para legitimar la recolonización fueron la fundación en
1921 de el Council on Forgeign Relations CFR, la creación de la Liga
de las Naciones y la redacción del Tratado de Versalles.
incluso alianzas entre enemigos irreconciliables por beneficios económicos
para una élite mundial. Las primera y segunda guerras mundiales, la
guerra fría, la guerra del pacífico hacen referencia a la recreación
del mundo colonial y sirve para conocer los antecedentes del Nuevo Orden
Mundial y el enriquecimiento de una élite global, que sistematiza
su desenvolvimiento
Con
la creación del Banco Mundial, del Fondo Monetario Internacional, de
las Naciones Unidas y de sus agencias internacionales especializadas,
y con el financiamiento de movimientos favorables a una unificación
de Europa mediante el Comité Americano para una Europa Unida, se avanza
hacia la conformación de una Gobierno Mundial o Nuevo Orden Mundial.5
La extracción de estaño
en Bolivia representaba la tercera parte de lo que se extraía en el
mundo durante la primera mitad del siglo XX. La muerte de Germán Busch
representó la supresión de las restricciones para los mineros de construir
un monopolio con las riquezas del país. Simón Patiño en 1942 ordenó
una masacre para disolver una huelga, la masacre de Catavi, al norte
del departamento de Potosí. Se evidencia la participación de las empresas
transnacionales como la Rockefeller y la United Fruit Company en los
golpes de estado en Bolivia y Guatemala respectivamente.
La falsa dicotomía
liberalismo-conservadurismo es reemplazada por otra entre la izquierda
y el populismo. Nuevas constituciones, elecciones y la creación de
partidos configuran un nuevo diseño colonial que asimila a la naciente
clase media. En toda Latinoamérica se crean partidos populistas y presidencialistas.
En Bolivia el MNR atravesó dos periodos coloniales, la semicolonialidad
y la recolonización neoliberal. En 1952 después del Decreto N. 3223
que nacionalizaba las minas de Bolivia, de manera subterránea se seguía
permitiendo la extracción y venta de minerales a empresas transnacionales,
sin aparecer a la luz pública como un gobierno entreguista. Igualmente
un conjunto de empresas fueron intocadas a cambio de afectar a terratenientes
de occidente. Firmará también contratos vergonzosos de la COMIBOL
con empresas trasnacionales.
Si ignoramos las elecciones
anuladas o seguidas por golpes de estado inmediatos, sólo se presentaron
tres excepciones al dominio absoluto del MNR; en 1966, 1989 y 1997.
En 1985 Víctor Paz firmaría acuerdos de trascendental importancia
para la recolonización y de catastróficas consecuencias para Bolivia
con Hugo Bánzer Suárez, un hombre conocido por sus métodos fascistas
y sanguinarios, en parte adquiridos en la tristemente célebre Escuela
de las Américas dependiente del gobierno de Estados Unidos.
Mas tarde las trasnacionales
en su expansión primario exportadora empobrecían a la humanidad
provocando mortandades, cuando empezaban las rebeliones acudían
al financiamiento de empresas proyectos de esterilización de poblaciones
africanas e indígenas en América o de asimilación indigenista. En
nuestros tiempos entre 2007-2008 el promedio de los precios alimenticios
se duplicó, debido al alza del los precios de los combustibles y la
profusión de cultivos para biocombustibles, frente a lo cual las trasnacionales
trafican con la escasez de alimentos e impulsan el negocio que representan
las guerras y las carreras armamentistas. Primero preparan el cóctel
explosivo y luego lo apagan con sangre. La cantidad de dinero que se
gasta anualmente en armamento es superior a la que se gasta en el mismo
periodo en la tarea de mitigar el hambre de millones de personas alrededor
del mundo.
La red de organismos
se han convertido en un sistema donde están el Comando Sur y las bases
militares (también inéditamente hoy esta presente la OTAN e Israel),
la Fundación Nacional para la Democracia (NED-1983), la Fundación
Internacional para Sistemas Electorales (IFES-1987), el Centro para
la Empresa Privada Internacional ( CIPE), la Agencia Internacional para
el Desarrollo (USAID), los Think Tanks
que trabajan en remozar la política imperial, los centros de investigación,
entidades académicas y de Cooperación y las miles de ONG. Estas últimas
con sus proyectos micro en su mayoría despolitizan, desclasan, desmovilizan,
aparentan solidaridad y atentan contra el Estado. Destaca la mayor participación
de los medios de comunicación en el manejo de la información y el
amedrentamiento de los ciudadanos en época de paz y de guerra, la propaganda
de temor hacia el cambio y mas aun al socialismo.
La IV flota con sus
portaviones y bases militares a lo largo del Pacífico donde Colombia
esta transformándose en el Centro de Operaciones de los Estados Unidos
y en el eje que va desde México hasta Chile, con siete bases
navales(2), aéreas (3)y terrestres(2): Palanquero y Tolemaida
en Cundinamarca, Apiay en Meta, Malambo en Barranquilla, , Larandia
en Caquetá, Cartagena y Malaga desde donde partirán ejercito, aviones
y barcos de combate a cualquier lugar de Latinoamérica o el Caribe
para tumbar Gobiernos o defender la gobernabilidad en los que controla
para garantizar la depredación. Al ser rechazadas las bases norteamericanas
en varios países como Argentina, Venezuela, Nicaragua, etc. Estas se
concentran en Perú, Colombia, México y el Caribe. No parece casual
que el presunto secuestrador de Aristide en febrero del 2004, el Coronel
Richard Juergens Director del Comando de Operaciones Especiales
este a cargo de la base Soto Cano en Honduras.6
La descolonización
es mucho más que un tema simplemente cultural o de debate teórico.
Chávez ha entendido que la lucha por la descolonización para que adquiera
sentido tiene que ser global, continental y nacional. Con esto demuestra
dos cosas primero que el Estado tiene un papel de primer orden para
enfrenar al imperialismo y segundo que existe continuidad en la política
norteamericana pues son políticas de Estado. Por tanto, la lucha no
puede cesar ni dar treguas y tiene que darse en varios planos en los
que adquiere centralidad el Estado. Una lucha que se pone en evidencia
al enemigo, se alimenta de la memoria histórica, combate las mentiras
de los medios
Si bien es cierto que
existen avances en la autodeterminación respecto al hegemón no ha
revertido el retroceso neoliberal que aun se asienta en las empresas
mineras, bancarias, industriales y medios, símbolos de progreso.
La Amazonía, la minería a cielo abierto, el cultivo de la soya y caña
de azúcar siguen a expensas de las trasnacionales. No obstante que
la renegociación de contratos petroleros fueron un significativo avance
no fue una verdadera nacionalización, muchos planes sociales han configurado
nuevas formas de dominación, de cooptación clientelista, que no modifican
las desigualdades estructurales. No se justifica la participación en
la ocupación de Haití, la presencia del IIRSA, la acción de ONG desde
abajo y organismos contrarrevolucionarios desde arriba, la reactivación
de los partidos de la derecha y la inacción de la organización popular,
las actividades de las corporaciones económicas, trasnacionales y del
aparato mediático que fragmentan al movimiento, inculcan el individualismo,
desilusionan a los pueblos.
Nuestro incognito autor
concluye que Bolivia y los pueblos del mundo en general merecen librarse
del dominio de delincuentes, que con apariencia de servidores públicos,
acumulan fortunas dejando a la inmensa mayoría de la humanidad pidiendo
respeto, agua y pan. 7
NOTAS
- José Luis Fiori, Giovanni Arrigí, www.sinpermiso.com , 12/07/2009.
- Pablo González Casanova, El discurso de la rabia, www.rebelion.org , 06/07/2009.
- Alfredo Jalife Rahme, La banca infernal: la esclavitud histórica de los Rotshshild, La Jornada, julio, 2009.
- María Lohman (coord.) (2006) Colectivo Sur El nuevo orden mundial y el saqueo de Bolivia Bolivia, Ediciones Somos Sur, p. 58
- Op. Cit. 9 p.131
- Thierry Meyssan, El SouyhCom toma el poder en un Estado del ALBA, www.redvoltaire.org
- Op. Cit. p. 34
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