COYUNTURA: EL TERREMOTO Y LAS POLÍTICAS DEL GOBIERNO
Movimiento al Socialismo
En definitiva, frente a la
crítica situación socioeconómica que vive el país, agravada por los desastres
naturales, el régimen correista continúa descargando la crisis sobre las
espaldas de la población más pobre y aprovecha el estado de shok colectivo provocado
por los desastres naturales para obtener recursos financieros y mantenerse en
el poder, cuando la alternativa real debía ser justamente la contraria: que
sean los más ricos sean los que más contribuyan para enfrentar la recesión y la
reconstrucción de las zonas afectadas por el terremoto.
El terremoto del 16 de abril puso
al descubierto la falta de previsión y preparación de la sociedad, pero
sobretodo del Estado, frente a los desastres naturales que la ciencia y la
historia nos dicen que han ocurrido y deben ocurrir inevitablemente.
En el aspecto coyuntural el desastre se presenta en una situación de crisis económica que se expresa en hechos como el casi nulo crecimiento del PIB, la caída de los precios del petróleo y las exportaciones, el déficit fiscal cercano a los 10 mil millones de dólares, el acelerado nivel de endeudamiento externo e interno, la ola de despidos tanto en el sector privado como en el público, la falta de liquidez por la disminución de depósitos en el sistema bancario, etc.
En el tema estructural, no se han
realizado las transformaciones ofrecidas en las campañas electorales de la
“Revolución Ciudadana”, tales como el cambio de la matriz productiva, la
soberanía nacional frente a las transnacionales y la grandes potencias, una
revolución agraria que garantice la soberanía alimentaria, la superación de la
extrema pobreza, la disminución significativa de la desigualdad entre clases sociales,
la democracia participativa, iguales oportunidades para el acceso a la
educación y la salud, entre otras.
El sismo de abril ha sacado a
flote las enormes carencias de un país desigual y atrasado. Por ejemplo: en los
10 cantones más afectados de Esmeraldas y Manabí, el 74,4% de la población no
disponía de los servicios básicos y el 42,3% vivía bajo la linea de la pobreza
por consumo.
Es decir, el modelo desarrollista
y modernizante impulsado por el correismo ha tenido un rotundo fracaso, pese a haber
contado con los recursos financieros más alto en la historia del país.
Políticas de Correa frente a la crisis
Frente a la grave crisis
humanitaria desatada por el terremoto, el gobierno de Correa ha
aprovechado la situación para imponer una serie de leyes y medidas económicas
que tendrán un fuerte impacto sobre la economía nacional y popular. Ente ellas
podemos mencionar las siguientes:
- La llamada “Ley de
Solidaridad”, aprobada por la Asamblea Nacional y el ejecutivo, cuyo aspecto
medular es la elevación del el IVA del 12 al 14% con la cual se busca obtener
unos 750 millones de dólares. Este impuesto es regresivo porque
proporcionalmente lo pagan más los que menos tienen. Afecta más a la población
de menores recursos que debe destinar un porcentaje mayor de sus esquilmados
ingresos para adquirir productos como comida en restaurantes, compra de ropa,
de electrodomésticos, o servicios como telefonía celular, asistencia a eventos
culturales y un sinnúmero más. Los otros puntos que contempla dicha ley representan
solamente unos 250 millones de dólares.
- Poco antes fue aprobada y está
vigente la “Ley Orgánica de Equilibrio de las Finanzas Públicas” que incrementó los impuestos a las gaseosas,
cigarrillos y cervezas y otros. Más allá del pretexto utilizado por el gobierno
argumentando que el objetivo de dicha Ley es cuidar la salud de los
ecuatorianos, su objetivo es recaudatorio y afecta sobretodo a los dueños de
pequeñas tiendas y negocios.
- La firma del Acuerdo Comercial
con Europa, en la práctica un TLC, entra a la recta final con el nombramiento
de Carlos Casinelli, representante de los grandes empresarios, como nuevo
Ministro de Comercio Exterior. Este acuerdo tendrá graves consecuencias para la
economía de los pequeños productores, especialmente agrícolas que no podrán
competir con los productos importados de grandes transnacionales europeas y
favorece a los grandes exportadores.
- El retorno al redil del FMI
para obtener nuevos créditos que están condicionados a la aplicación de medidas
de austeridad económica y elevación de impuestos y tarifas a los servicios
básicos, aunque el gobierno lo niegue. Para muestra un ejemplo: ya está en
marcha la subida del transporte.
- Se halla en trámite por parte
de la Asamblea Nacional la Ley de Ordenamiento Territorial, Uso y Gestión del
Suelo, con dos objetivos fundamentales: recaudar más tributos y ejercer control
sobre los gobiernos locales (GADs) a
través de la creación de una nueva Superintendencia que regulará a los
municipios, lo cual contradice las normas constitucionales.
- El anuncio de la venta de
varios bienes y activos del Estado como la Hidroeléctrica Sopladora que es la
tercera más grande del país, la CNT, empresa estratégica de las comunicaciones
que más bien debería ser fortalecida, el Banco del Pacífico, La Flota Petrolera
Ecuatoriana (FLOPEC), la empresa aérea TAME, dos canales de TV, entre otros. Es
decir, se aceleran los procesos de privatización, accediendo a las presiones de
los grupos de poder económico. “El terremoto ha constituido la ocasión propicia
para el asalto a los bienes del Estado”, como lo señala el analista Jaime Muñoz
Mantilla en su artículo “La doctrina del shok aterriza en el Ecuador” (Línea de
Fuego, mayo 2016).
El cáncer de la corrupción
Además, siguen saliendo a la luz
hechos que ponen de manifiesto la grave corrupción que aqueja a las más altas
esferas del Estado. El último escándalo, a propósito de los “Panama Papers”,
evidencia que los grupos económicos más poderosos del país han constituido
empresas off shore en Panamá y otros paraísos fiscales, muchas veces para
eludir impuestos e inclusive para lavar dinero ilícito. En este affaire aparece involucrado al
ex-Gerente de Petroecuador, Álex Bravo, que fue destituído por el Presidente
Correa. Pero el tema va mucho más allá. Según la denuncia de Fernando
Villavicencio, Álex Bravo, junto a personajes como el ex-Ministro Pareja
Yannucelli, forman parte del grupo Azul
que, a través de la cobertura con la empresa australiana WPI, han manejado
proyectos como la rehabilitación de la Refinería Estatal de Esmeraldas y han
realizado más de 200 contratos a dedo por un enorme monto que estaría entre los
1500 y 2000 millones de dólares.
Una real alternativa
En definitiva, frente a la
crítica situación socioeconómica que vive el país, agravada por los desastres
naturales, el régimen correista continúa descargando la crisis sobre las
espaldas de la población más pobre y aprovecha el estado de shok colectivo provocado
por los desastres naturales para obtener recursos financieros y mantenerse en
el poder, cuando la alternativa real debía ser justamente la contraria: que
sean los más ricos sean los que más contribuyan para enfrentar la recesión y la
reconstrucción de las zonas afectadas por el terremoto.
Necesidad de la unidad para
dar continuidad a la lucha
Hoy más que nunca es necesario
impulsar y fortalecer el proceso de unidad de las fuerzas populares y las
organizaciones sociales que se han movilizado en las calles en los últimos años
por sus derechos fundamentales y continuar en la búsqueda de una alternativa
económica, social, política y cultural para enfrentar al modelo capitalista
decadente y depredador que se halla en crisis a nivel mundial.
De allí la necesidad de enfrentar
el próximo proceso electoral con un programa clasista y popular que recoja las
necesidades más sentidas por los trabajadores y las clases y grupos sociales
oprimidos. También es necesario que la participación electoral sea con candidatos
propios consecuentes con dicho programa y que garanticen la independencia de
clase. No podemos volver a repetir los errores de la “izquierda” en el pasado
que hipotecó sus luchas y sus fuerzas a candidatos de la burguesía como en los
casos de Lucio Gutiérrez o Rafael Correa, los cuales una vez en el poder
actuaron para mantener el sistema de explotación capitalista, favorecer los
intereses de la burguesía y neutralizar la lucha social.
Movimiento al Socialismo.
http://chispaecuador.blogspot.mx/2016/05/coyuntura-el-terremoto-y-las-politicas.html