Juan Gallegos Soto
CHE, HÉROE NUESTRO DE CADA DÍA
(Che contra la globalización)
En ti se atrinchera y posee lo más puro de nuestras esperanzas de revolucionarios y lo más puro entre nuestros héroes queridos... (1) Y... ¡Vaya que tenemos un Hidalgo!, quien no escatimó su vida en aras de la libertad. Y un Morelos que se ungió como siervo de la nación, cuyo ejemplo no ha podido ser imitado, mucho menos igualado por funcionario público alguno, a excepción del indio egregio, soberano y zapoteca que enfrentó al Imperio de su tiempo y decretó la cancelación de la deuda externa: Benito Juárez; y un purépecha y General nuestro de Hombres Libres que expropió los sectores más álgidos de la economía nacional –electricidad, petróleo y ferrocarriles- : Lázaro Cárdenas; y un Cuauhtémoc, símbolo primero de la soberanía, la Rebeldía Nacional y del estoicismo y entrega a la lucha contra el invasor. Lucha ahora tan necesaria cuando nos es negada la autodeterminación de los pueblos por una política de lo global, tendente a borrar las nacionalidades, en ofrenda a la circulación libre del capital y de los supremos monopolios, donde el hombre, la niñez, la mujer y sus derechos son pisoteados, postergados y sujetos al principio de la ganancia como eje magistral de sujeción.
Sin respeto alguno al principio martiano: Injértese en nuestras repúblicas el mundo; pero el tronco ha de ser de nuestras repúblicas.
¡El extremo de la rapacidad! Privatizar el agua que junto al petróleo es la máquina vital que mueve al mundo! la primera progenitora de la vida.
Che, de ti, hay que hablar como lo hiciera Martí de Bolívar; con un haz de centellas en la mano y un puño de luceros en la frente.
Tu estafeta vuela en manos de Mercurio que enarbolada por las multitudes y la muchedumbre recorre a diario el mundo del uno al otro confín; buscando siempre la emancipación de la humanidad y la conquista de la libertad.
… No por caído tu luz es menos alta… (2); Tú persona y pensamiento se agiganta y trascienden el tiempo de la historia, / Heredándonos la ruta de la libertad y la victoria. / ¡Tu luz recorre los caminos de la selva y la montaña! /No encontrando más murallas /Que la mente que se atrofia o que se empaña.
… “No por callado eres silencio”… (3); ¡La conjunción de tu acción y tu palabra es todavía más alta! / No hay menester que dé más gloria / ¡Que la de ser manchego eterno!, /Cabalgando sin sosiego, / En este mundo del infierno/ Procreado por el ego.
¡No rememoramos tu caída,
Sino, tú vivir eterno
Confiados termine la desdicha
Si aprendemos a imitar tu ejemplo!
(1) Paráfrasis del texto de la Carta del Che a Fidel
(2) Paráfrasis del poema Che Comandante Amigo de Nicolás Guillén
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