Noviembre 2014
Noviembre 2014
¡Tú que si puedes con tu vida!
¡Ni la pura verdad pareces!
¡Cuando no puedes con tu vida de fracasos
e intentas destruir la de los demás!
¡Mírate y encuéntrate para nunca más perderte a ti mismo (a)
sin tener que buscar quien te de la vida que sólo tú puedes encontrar!
Tú que si puedes con tu vida
y no intentas destruir la de los demás;
tú que cada mañana despiertas y te miras
a ti mismo (a)
capaz de ser lo que deseas y quieres ser.
Tú que cuando te acuestas si puedes dormir porque tu cabeza piensa que puedes ser útil
y ayudar y hacer la vida más fácil
a tu entorno social.
A ti mismo te dices, “no pierdas el tiempo”
que la vida de nadie está plena de felicidad.
El llanto nos hiere sin poder cantar.
Tu gran contento reside en que puedes mirar, enjugando tus lágrimas que empañan tus ojos
y logras ver que el mundo no llora
en la oscuridad
y un mundo distinto
sin llanto
se puede alcanzar.
Sonrisa y canto debemos globalizar,
no con intrigas, chantajes ni engaños,
sino con un buen andar.
Saber que la carne y hueso no bastan
para eternizar
nuestros procederes de samaritanos
que pretendemos santificar.
No es suficiente con una sonrisa,
¡debemos actuar!
sin dejar que pase impune
quien nos pretende matar;
así las sonrisas se han de multiplicar.
Que el odio no ciegue a ningún mortal
y los resentimientos no puedan hablar;
sólo así tú habrás hecho bien a la humanidad
y ni la cicuta te podrá dañar.
Es el universo que te hace soñar,
y así ni una espina te puede alcanzar,
y que es parte de todos en el caminar.
Ese universo
y mar de pueblo que te quiere
y quieres
y te enseña todo: a no hacer daño
y a saber amar.
¡Ojala que el carajo no te alcance jamás!
Y la sensatez y el juicio sea tu caminar.
Juan Gallegos Soto
ECDOTICA Leemos tus pensamientos*
Asuntos terrenales y divinos de Juan Gallegos Soto
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