El Desarrollo en el Neoliberalismo y las políticas sociales dirigidas a las mujeres en México Eugenia Azcatl Hernández
En este apartado se abordará la influencia que la política de desarrollo neoliberal ejerce sobre una población como las mujeres, en términos de políticas sociales, además, cómo éste sistema, mediante sus principios fundamentales, utiliza a las mujeres para generar mayores ganancias y aumentar la productividad, reproduciendo y agudizando, su condición y su situación de subordinadas.
En el caso de México, es a partir de los setentas, cuando se plantea específicamente "la necesaria incorporación de las mujeres al desarrollo ." Cuando el modelo industrializador o de sustitución de importaciones muestra sus limitaciones, se cuestionan los postulados teóricos y prácticos que lo sostenían y que se traducían en dicho concepto (Zapata:1994:135). La influencia de los organismos internacionales, de los países ricos desplegadas en los congresos y reuniones encaminadas a fomentar y a expandir su discurso de Desarrollo dirigido a los países "pobres" , incluía el derecho a "la igualdad" de trato para el derecho del hombre y la mujer. Los organismos como el FMI (Fondo Monetario Internacional) y el BM (Banco Mundial) , a través del apoyo financiero y el ejercicio de su poder se impusieron ante los países latinoamericanos, como México, y los llevaron a responder a la crisis y al endeudamiento ante estas instancias, y a aplicar una lista de medidas que les permitieran reforzar el papel del libre mercado, la competencia y la acumulación desmedida de la ganancia.
Para realizar una revisión más comprensible acerca de la relación de la mujer con los conceptos y principios neoliberales, es necesario vincularlos directamente con las políticas sociales donde aterrizan dichas políticas, y que logran orientar el funcionamiento de cualquier proyecto productivo. Los países neoliberales primer mundistas determinan la toma de decisiones con respecto a qué producir, cómo y para quién producir. Visto de esta forma, la ganancia, el libre mercado, la competencia, la propiedad privada, un gobierno pasivo, entre otros conceptos básicos señalados por Smith (1776), orientan el crecimiento y el desarrollo de los países denominados tercermundistas y el bienestar de cualquier hogar.
Puede estimarse como más deseable para orientar a la sociedad, especificar las condiciones precisas de bienestar, desarrollo y crecimiento, ya que no es lo mismo el antecedente histórico y las condiciones de países occidentales y orientales que las de las sociedades latinoamericanas. Los conceptos como desarrollo y crecimiento son fundamentales en cualquier economía para conocer los principios en que se sustentan, y si incluyen a todos o sólo a determinadas clases sociales, de modo que responda a la pregunta de cómo y quién o quiénes son los que van a organizar económicamente a determinada sociedad, considerando que la lógica económica no es la única pero sí la predominante. Para la existencia equilibrada de cualquier sociedad lo cultural, lo político y lo social son dimensiones que deben integrarse para percibir cabalmente las líneas generales del bienestar, el crecimiento y el desarrollo integral de un individuo y de un país.
Con respecto al desarrollo existen diferentes acepciones, entre ellas encontramos que la más común definición de desarrollo es la adquisición de bienes y servicios, que supone alcanzar determinado grado de bienestar, generalmente pautado por los países desarrollados. Así se es "desarrollado" si 1) se tiene el ingreso per cápita de Francia o de los países escandinavos 2) si se consume, lo que consume un ciudadano norteamericano, 3) si se cuenta con medios de consumo durables como autos, refrigeradores, TVs, casas, microondas, y kilometrajes de vuelos en avión. El cuestionamiento al respecto es ¿De qué tipo de bienestar se habla? ¿Cómo se producirán dichos bienes y cómo se distribuirán? ¿Qué reservas de energía tiene el globo para sostener esas despensas? ¿El concepto de desarrollo tiene que ver con tener "más" o significa cualquier otra cosa? Al referirse a "calidad de vida " se sabe exactamente para quiénes va dirigido y en qué medida, porque si calidad de vida es poseer todo lo habido y por haber, entonces la distribución es muy desigual y sólo va dirigida a determinado grupo de individuos.
En seguida, tendría también que darse una reflexión sobre el uso y abuso que está teniendo en el discurso político y en la práctica económica la visión del crecimiento, restringida al aumento de las ganancias del sector corporativo, fuertemente concentrado. Habría que ver el significado social de todo eso, precisando que, contra lo que es común imaginar, los conceptos de desarrollo y crecimiento económico, no significan necesariamente lo mismo. Una primera definición con respecto a estos conceptos es que el crecimiento económico se refiere a más bienes y servicios producidos en un país sin clara definición de su apoderamiento y desarrollo económico incluye el significado de crecimiento económico, más cambios significativos en el sistema político, el económico y el social (Pool y Clement, 1997:4).
Lo anterior permite desenmascarar conceptos como desarrollo y crecimiento, que hoy en día siguen abanderando a las políticas económico sociales y entran en contradicción cuando algunos proyectos productivos no alcanzan ningún crecimiento, y menos aún un desarrollo. Es así como deteriora a lo social el sistema neoliberal que sólo busca acumular el capital. La teoría capitalista se ha transformado, tanto en la teoría como en la práctica en los diferentes momentos históricos; sin embargo existen principios que se han mantenido como una constante y que fundamentan la teoría económica capitalista.
Una vez señalados los cuestionamientos y aseveraciones anteriores nos centraremos en vincular los principios fundamentales del neoliberalismo aterrizados en los proyectos productivos o micronegocios. Presentes cuando se trata de alcanzar la ganancia mediante la productividad de las mujeres.
La competencia forma parte del modelo capitalista. Aunque desde un inicio fue señalado por Smith dicha competencia perfecta nunca fue real, según él evitaría la acumulación de riquezas en sólo algunas manos. Sin embargo, en esta nueva fase, no existe dicha competencia perfecta, sino una libertad total para usar las estrategias necesarias de modo que la sobreexplotación de la mano de obra, en un inicio de hombres, ahora de mujeres y niños, sea el motor para competir, reducir costos (sin incrementar los ingresos reales de los trabajadores), y proteger la tasa de ganancias del capitalista.
El trabajo como la actividad más explotable entre los individuos… "El nacimiento de la fase globalizante se conduce entre fuertes y sucesivas reformas en la organización y estructura de los procesos de trabajo" (García Morales, revista Globalización, 2001). Entrando a una fase de destrucción del trabajo" este se lleva a cabo "en nombre de la productividad", como bien señala García Morales mediante la especialización y la división del trabajo que lleva a sustituir la mano de obra por la tecnología, además de sacrificar los empleos cuando la tasa de ganancia de los capitalistas se ve amenazada. Esto es, la mejor evidencia de que existe crisis. Lo que algunos llaman la destrucción del empleo, no es más que la catástrofe mayor, y el golpe bajo que viene a pauperizar la condición de los diferentes grupos sociales, que se encuentra sin un ingreso- dinero para sobrevivir, ya ni siquiera denominarlo como "bienestar".
Entonces, ni siquiera se trata del aumento o disminución de los salarios, pues a partir de los noventas en Latinoamérica y en México, el mayor problema es el desempleo. Esto significa que no existe poder adquisitivo en la mayoría de la población, sino por el contrario toda una serie de necesidades básicas insatisfechas para todos aquellos grupos que desde el inicio quedaron fuera de este sistema, como un sistema excluyente. Es así como en estos países el índice de desempleo va en aumento y se ha convertido en el mayor problema para la población. Entendemos que es un problema y una contradicción del propio sistema capitalista. En los países que alcanzaron mayor crecimiento en sus economías como E:U y Japón, tras tener los mayores índices de empleo, ahora va encaminando a su población al desempleo, semiempleo y a la marginalidad. Todo esto en medio de un acrecentamiento de la competencia que hace que las mujeres se hayan vuelto en fuerza de trabajo explotable y capaz de alcanzar altos índices de productividad a favor de la ganancia.
Otra principio del capitalismo neoliberal es el libre mercado vinculado directamente con un gobierno pasivo como señalaba Smith. El libre mercado conlleva en este sistema, a una competencia desigual e injusta. Debido a que el mercado no es libre para cualquier pequeña empresa que tiene que cubrir con toda una serie de requisitos hacendarios, impuestos y condicionantes del mercado, pero contradictoriamente sí existe libertad absoluta para todas aquellas grandes corporaciones que evaden toda una serie de impuestos, y esconden toda una serie de corrupciones inconcebibles. El neoliberalismo globalizador pregona a los cuatro vientos el libre mercado, el ahorro y la inversión para las trasnacionales, pero a su vez, impulsa la dependencia de los países en Latinoamérica buscando:
- Mayores ganancias, existiendo una mayor movilidad del capital, en los países en subdesarrollo como los latinoamericanos.
- Ahorro es sinónimo del aumento de la tasa de ganancias de las corporaciones (tras la privatización, y llegado el tiempo de la "depresión de mercados"). Término clave en la misión privatizadora.
- Las reformas a los estatutos laborales que limitan las condiciones laborales y los salarios.
- Además, de aplicar programas de flexibilización y ampliación del desempleo, en cualquier país que aplique el modelo capitalista.
Lo anterior, son los efectos de las crisis, y su mejor señal de crisis. Entonces, ¿dónde se encuentran las promesas de "bienestar", de "abundancia" para todos los estratos sociales, y para los países globales?, ¿dónde esta el Estado-gobierno que se encargaría de regular todas esta irregularidades del sistema? Las denominadas "economías burbujas" en México tienen un trasfondo que oculta toda una serie de corrupciones inimaginables (fraudes, ilegalidades, endeudamiento, etc), pasando la banca en manos de empresas extranjeras."Las preferencia por los medios de trabajo y de consumo propuesto por las empresas trasnacionales, origina una descomposición de otras formas sociales de producción y polariza al extremo, la riqueza (García Morales, 2001). La concentración de capital como constructor monopólico, es decir, fusiones para grandes inversiones, para mayor capacidad crediticia de las compañías.
Además, como señaló Smith el orden va a ser una cuestión "natural" va a venir por sí mismo, sin la intervención de instituciones que regulen la economía, principalmente. Una forma tan distorsionada de utilizar el lenguaje sólo para decir que se necesita del Estado, pero no para limitar las acciones liberales, sino para asegurar que se lleven acabo.
El neoliberalismo puso en duda el manejo del Estado asistencial (benefactor), denunciándolo como costoso, centralista e ineficiente y como responsable del estancamiento y de las crisis económicas recurrentes, así como no alcanzar las metas igualitarias que planteaba. Según el peso que adquirió la intervención estatal en la economía y en los aspectos político-sociales, a juicio del neoliberalismo las decisiones perdieron su racionalidad; éstas fueron el resultado de negociaciones y de acuerdos políticos que alteraron por lo mismo la gestión gubernamental. (Jiménez, 1992:58).Tras la crisis que desbordó los mecanismos regulatorios del Estado en la economía, éste perdió legitimidad. Lo cual significó una búsqueda de nuevos paradigmas para resolver las dificultades económicas como respuesta ideológica al estatismo y al socialismo soviético cuya influencia iba en aumento en los países subdesarrollados.
Esto último reafirma cómo tras el neoliberalismo se pone a los estados- nación al servicio del mercado. Además, como la implantación y aplicación del sistema neoliberal se ha llevado a cabo con violencia, represión y en complicidad con ciertos estados–nación para que repriman el descontento social que provoca el ajuste económico, y de esta manera utilizar todo el poder del Estado para enfrentar a quienes se oponen al modelo y a las políticas neoliberales" (Ornelas:2001:21), pero al mismo tiempo, y contradictoriamente, se requiere de un Estado pasivo y regulador de la economía. Después se induce a la búsqueda de un estado más barato, de operadores políticos que directa o indirectamente representan no al pueblo sino a los poderes fácticos: el estado imperial y las corporaciones transnacionales en primer término, al capitalismo nacional "raté", estructuras caciquiles tradicionales... y a los propios operadores políticos constituidos en mafia (García Morales, 2001).
Entonces, se puede señalar, que el mercado y la ganancia son los ejes ordenadores de la vida social y política. De esta forma tanto un país, una región y sus habitantes deben adecuarse y preparase para atraer las inversiones extranjeras, para sobreexplotar la mano de obra (mujeres, niños, hombres), y en un mundo tan competido es preciso sacrificar a trabajadores, salarios, empleos y todo lo que sea necesario, pues detrás de todo esto se llega al "bienestar" y la "civilización" (sinónimo de incivilización) a todo el mundo (Ornelas,2001:45).
En el caso particular de un país como México las relaciones entre el pueblo- estado conforman una especie de red, en conjunción con el modelo neoliberal que en las última décadas ha fijado la dirección de la acción social, las relaciones entre los individuos, y encaminado a un proceso que lejos de responder y alcanzar a resolver el conflicto social tiende a apaciguarlo.
De esta forma, un grupo particular: las mujeres --se ven envueltas en todo este entramado, y se busca constantemente su integración. El abierto cuestionamiento a la necesidad de integrar a las mujeres al desarrollo, se justifica por las condiciones inferiores que éstas tienen en la sociedad y su exclusión de los "beneficios" del "progreso", y "desarrollo" económico comparados con el papel que naturalmente se le asigna al hombre como jefe de familia y como único y mayor beneficiario de los créditos y financiamientos. Acuñando el término Mujer en el Desarrollo (MED) en esa misma década por la Comisión femenina, de la Sociedad para el Desarrollo Internacional, se estudió el problema de la mujer, diagnosticó, señaló errores y dictaminó que era necesario integrar a la mujer al desarrollo. Como si ese desarrollo existiera…
Es así como se diseñaron políticas y programas desde la visión internacional. A nivel nacional se dirigieron a mujeres, predominantemente rurales, centrándose en su rol de esposas y madres y orientando dichos programas a la "solución" de los problemas prácticos de género (o de la mujer). Estas políticas desde un primer momento tuvieron dos enfoques: a) las asistencialistas que se dirigieron a las mujeres como madres: programas de salud, cuidado de los infantes, etc; y a eficientistas que la vieron como fuerza de trabajo no utilizada. Parecía tener un enfoque social y humano, pero aún y cuando enarbolaba enfoques como crecimiento con equidad, en atención a las necesidades básicas, para cubrir éstos se partía de principios del libre mercado y la ganancia.
A partir de los ochentas el Estado imperante se sustenta no sólo desde una perspectiva de género, sino como ya se señaló anteriormente, se trata de una imposición económica que replantea la cuestión del género y la participación de las mujeres en el sistema neoliberal, así como de otros grupos pobres y marginados. La desigualdad social generada a partir de la oposición binaria y el sistema de relaciones de género forman parte del significado del propio poder, que en caso de cuestionar o alterar cualquiera de sus aspectos, amenaza a la totalidad del sistema (Scott,1996:300).
Llevar de la mano a las mujeres al denominado "desarrollo" y participación productiva sin crear condiciones sociales, culturales y económicas de bienestar conduce a un camino sin salida. Si bien es cierto que al dejar intacto el poder y la situación de los hombres, al recaer en las mujeres, lo que al Estado le corresponde proveer, se empujó a las mujeres a un círculo de cambio sin transformación (Portocarrero,1990:51). El integrar a las mujeres al "desarrollo" en las condiciones y circunstancias más difíciles y deplorables, en este rubro caerían las políticas encaminadas a las actividades domésticas, la generación de ingresos, los aspectos de vivienda, servicios básicos a la vivienda, lo que no transformaría la condición de subordinación de la mujer, sino más bien, servirían para reproducir y fortalecer las estructuras que las originan (Zapata,1994:144).
Dado que el trabajo femenino es "invisible", no remunerado y por lo tanto desvalorizado, significa necesariamente una ventaja para el capital y la ganancia. Entonces, los programas y los proyectos han aprovechado el aporte económico y social de la mujer a las actividades de producción y reproducción, dando como consecuencia el aumento de la carga laboral, sobre todo para las mujeres que se encuentran ubicadas en los sectores más rezagados de la economía: las mujeres rurales e indígenas.
También es necesario considerar que el centrarse en el empoderamiento de las mujeres no soluciona el problema por sí mismo. ¿Según el espacio de poder que ocupen, es como las mujeres van a ejercer el poder? Es pensar que una mujer como Elba Esther Gordillo puede ejercer el poder sobre, en tanto que otra como Chonita, debe pensar en un poder para los demás? En tanto que en las altas esferas hombres y mujeres ejercen el más crudo poder.
Las políticas dirigidas a mujeres en términos del Género en el Desarrollo tienen varios enfoques que se entremezclan entre sí y que Batliwala (1997, 205-207) señala:
: las mujeres son visualizadas como el factor clave para el bienestar de sus familias y sus comunidades. Bajo esta línea encontramos las políticas públicas dirigidas a mujeres que pretenden incentivarlas a participar y a tener mayor confianza de sí mismas de modo que les permita ser "productivas" y "aprovechar" sus características naturales de responsabilidad y compromiso con su familia, antes que con ellas mismas y con los demás.
- El enfoque de Desarrollo Integrado
El empoderamiento económico : detrás de este enfoque se esconde la creencia de que es la falta de poder económico la causa de la subordinación de las mujeres, por lo tanto todo cambiaría de mejorar el control de éstas sobre los recursos económicos. En esta lógica el GED ha intentado "empoderar" a las mujeres de modo que resuelva sus problemas de subordinación y dominación, sin embargo aún y con la remota posibilidad y difícil éxito de aumentar el ingreso de las mujeres en sus hogares; en espacios como el hogar y en espacios públicos no alcanzan a transformar, ya no digamos cambiar sus relaciones desventajosas entre los géneros.El enfoque de concientización : este enfoque se basa en la idea de que, para que las mujeres logren cambiar su situación de subordinación, es necesario que comprendan los factores que generan dicha dependencia. Se requiere de algo más que programas de carácter educativo y de autorreflexión sobre género. Sobre todo porque como primer paso sí se requiere de una concientización de sí mismas y del entorno que las rodea y por supuesto entrar a procesos como la individuación como la antesala a la tranformación de la identidad de género. Sobre todo en términos de la relación dialéctica entre los mismos individuos y con las estructuras que hacen de esto un proceso aún más complejo.Estas tres posturas recuerdan el hecho de que las mujeres tienen que aumentar la seguridad en sí mismas, tener poder económico y ser más productivas, pero todo esto con la finalidad, según la política de desarrollo de "utilizar" su participación como fuerza de trabajo explotable, con los consecuentes ejercicios de poder sobre ellas mismas y sobre los demás. Estas tres lógicas se entremezclan y confunden con el poder tradicional en la práctica, y son de gran complejidad cuando se hace referencia a las mujeres en el "desarrollo", cuando esta palabra ya no es prioritaria en el capital.
Las feministas liberales hablan de empoderar a las mujeres, ¿pero acaso se establece en qué dimensiones en necesario empoderar a las mujeres y en qué dimensiones al hombre?. ¿A qué clase de mujeres mexicanas se hace referencia, la mujer indígena, campesina, urbana, rica o pobre determinada en qué y cómo, cada una de estas mujeres y sus grupos sociales requieren ser transformadas?
El siguiente cuadro muestra claramente la manera en que los principios liberales aterrizaron en las políticas adoptadas por el Estado Mexicano a principios de los ochentas, ante la consolidación del capital en Latinoamérica y en México. Se organizan a partir de diferentes enfoques: bienestar (1950-60), equidad y antipobreza (a partir de 1970), y el enfoque del empoderamiento inspirado por mujeres del hemisferio sur, varios de estos enfoque reaparecen en dichas políticas como lo muestra el siguiente cuadro.
Cuadro 1
Políticas públicas dirigidas a mujeres de 1989 – 1999, México
Periodo
Programa
Institución
Características
Desde 1980 hasta 1994
UIAMS Unidades Agrícolas industriales para la mujer campesina
-Surgieron con la reforma Agraria.
- apoyos dirigidos a afiliados Cenecista y al PRI.
1989- 94
PRONAM (Programa Nacional de Integración de la Mujer al desarrollo)
CONAPO
Dirigido campesinas
Algunos diagnósticos, proyectos productivos y materia poblacional.
1982-88
PROMUDER(Programa de Acción para la Participación de la Mujer Campesina en la Consecución del Desarrollo Rural), sólo surge el Subprograma UAIM
SRA (Secretaria de la reforma Agraria)
Dirigido a mujeres campesinas.
Estado no asignó recursos, no se concretó.
Parte de un diagnóstico
Autoempleo-Admn. Ingres
1983
permanencia cinco años
PINMUDE (Programa de Desarrollo Comunitario con la Participación de la Mujer) respondió Programas Regionales programas de Empleo
Secretaria de Programación y presupuesto (SPP)
Atención diferentes mujeres marginadas
Surge de compromisos contra "desigualdad social".
Centrándose: familiar- comunitario.
Agentes cambio y cohesión social
1989
-Tras PINMUDE pasó a MUSOL(Mujeres en Solidaridad)
- Programa de Apoyo a los Proyectos Productivos de la Mujer campesina
PRONASOL
- Surgen del PP después SEDESOL
- SRA
Feminización de la pobreza
Con recursos del 0.59%
Varias acciones, poca coordinación
Mayor inversión, mínima recuperación
Proyectos de mujeres (aves de traspatio, molinos, etc)
1995- 1999
MUSOL
PNM (Programa Nacional de la Mujer)
PND
Equidad, autoempleo, estimulo capacidad productiva, derechos mujer.
Fuente: Aranda, Josefina,2000.
Estos programas presentaron matices que pueden verse en la ejecución de los programas. En general, se caracterizaron por la discontinuidad de sexenio a sexenio. Las mujeres fueron, desde un inicio, objetos de los programas. A partir de las crisis más severas en México, el Estado orienta sus políticas sociales a otorgarles ciertos créditos como respuesta a las demandas y acuerdos internacionales, pero que en la praxis y poco a poco, todo esto ha consistido en integrarlas para aumentar la acumulación y asegurar la subsistencia del capitalismo. Los proyectos productivos que puedan emprender sólo se pueden concentrar en torno a actividades, que según el capital y el Estado, jamás serán productivas, sino a través de fuertes inversiones y de un mercado que no existe para determinado tipo de producción.
Las instituciones encargadas de dichas políticas crean oportunidades, pero al mismo tiempo, una serie de restricciones que refuerzan los principios de desigualdad entre los diversos actores como parte del sistema estructural de poder. Ejemplo de ello se encuentra en las burocracias y partidos políticos que determinan los grupos que van a ser beneficiados, y cuáles son las necesidades que consideran importantes: y esto los convierte en su clientela. La asistencia social por parte del estado crea dependencia y el mercado crea desigualdades que no pueden corregirse con sistemas de beneficencia.
Entones, se puede señalar que los problemas de las mujeres y de los hombres del tercer mundo no surgen de una falta de integración al proceso de desarrollo, se encuentran integrados, aunque con cada vez menos posibilidades de sobrevivencia. "Las masas de mujeres del Tercer Mundo están bien integradas a este proceso pero lo están en las escalas inferiores de una estructura de acumulación y producción inherentemente jerárquica y contradictoria" (Beneria y Sen, 1981: 69).
Por lo tanto, el GED es una perspectiva para el "desarrollo", mito del porvenir bastante presente en todo este entramado. Para las estudiosas del Género, consiste en un problema de relaciones entre hombres y mujeres, cuando en realidad ya se trata de relaciones entre el capital y el trabajo, en el cual el problema es todo el conjunto de relaciones "desiguales" y de poder donde se busca un "desarrollo integral" del capital "con equidad y mayor participación de las mujeres". Con respecto al aumento de la participación de las mujeres en la toma de decisiones, el cuestionamiento es: ¿de qué decisiones y de qué poder se habla? Se habla de la toma de decisiones: "para dirigir las acciones, las necesidades prácticas y hacia los intereses estratégicos de las mujeres". Pero en la realidad, la sujeción de la mujer trabajadora al sistema del capital,¿ la pone fuera del orden verdadero del poder?, porque carece entonces de capacidad decisoria efectiva en su círculo "público" y en su círculo más privado. Pero, cuando logra ejercer su poder, ¿qué sucede?