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LA EXISTENCIA REAL O IMAGINARIA DE LA CLASE SOCIAL

Eugenia Azcatl Hernández

El otro día leí en un libro
-añadió Andrés burlonamente-
que un viajero cuenta que en
un remoto país los naturales le
aseguraron que ellos no eran
hombres, sino loros de cara roja.
¿Usted cree que hay que afirmar
las ideas hasta que uno se vea las
plumas y la cola?

Sí; creyendo en algo más útil y
grande que ser un loro, hay que
afirmar con fuerza. Para llegar a
dar a los hombres una regla común,
una disciplina, una organización, se
necesita fe, una ilusión, algo que aunque
sea una mentira salida de nosotros mismos
parezca una verdad llegada de fuera...
 
Pío Baroja, El árbol de la ciencia

INTRODUCCIÓN

En no pocas ocasiones el término de "clase" social ha sido nombrado en alguna conferencia magistral en cualquier espacio académico e intelectual al intentar abordarlo y definirlo acudiendo a categorías económicas predominantemente, que lo integran y en no pocas ocasiones lo hacen difícil de comprender y explicar. Sin embargo más allá de iniciar con alguna definición, descripción de la división social o estratificación social, que responde a una separación diametral de las relaciones sociales que la envuelven, en este trabajo se pretende incursionar a la clase social como un fenómeno social complejo, real y antagónico. La clase social es un concepto que no es susceptible de ser comprendido definiéndolo dentro de cualquier corriente o pensamiento o en su defecto fragmentado hasta perder su esencia. La clase social puede alcanzarse a comprender sustancialmente si la colocamos en el centro de lo social sobre todo en el momento de analizar el tipo de relaciones que la integran y las personificaciones y condiciones del sistema capitalista burgués en el que se desenvuelve (y sobre todo afirmar las ideas como un loro hasta que se noten las plumas y la cola). Es decir cuando se habla de clase social se hace referencia a humanos regidos por relaciones específicas y no simples engranajes de un sistema económico. Sobre todo es necesario negar la continua subdivisión en grupos y subgrupos de los integrantes de una sociedad para ubicar a cada grupo en un subgrupo y éste en otro utilizando cuestiones como ingreso, salario, capital etc. Logrando complejizar las relaciones entre los individuos y haciendo relaciones más deshumanizadas y que se niegan a sí mismas a partir del interés de un grupo dominante en el poder.

De esta forma en este trabajo se intentará analizar el concepto de "clase" social en base a reflexiones que Marx hizo sobre las condiciones capitalistas y la existencia de una clase capitalista y una clase obrera que forman parte de un vivo ejemplar de la serie de relaciones inhumanas que florecen tras el surgimiento de dichas clases, (imaginar qué sucede tras la división mayor que se ha hecho de dichos grupos) y de lo perversa que resultan aprovechar la multiplicidad de los individuos y las relaciones sociales separando al sujeto del objeto como prueba de la existencia real de la clase social a partir de lo económico, e imaginaria porque es producto de la mente humana histórico y social. Pero también como un concepto que presenta serias contradicciones en el mundo capitalista, para lo cual surge la posibilidad de pensar una sociedad sin clases, posibilidad arrebatada a la imaginación para soñar otro tipo de sociedad donde la existencia de una "clase" social no sea pretexto para separar al humano del mismo humano y a su misma naturaleza. Una sociedad capaz de alcanzar la emancipación de romper con la existencia de la clase. Visto desde este punto de vista es internarse a un mundo incierto, pero al cual nadie esta negado a imaginarse y creer y el cual ofrece todas las posibilidades habidas y por haber, es una cuestión de jugar a pensar qué pasaría sí...

LA INDEFINICIÓN DE LA CLASE SOCIAL

Si bien es cierto que el pensamiento topológico sobre "clase" se encuentra dentro de la tradición del pensamiento burgués de igual forma reducir este concepto a un conjunto de definiciones y clasificaciones donde los datos de una sociedad se reduzca a un ordenamiento jerárquico (Bonefeld:1995) no parece decirnos mucho, sobre todo cuando se hace referencia a actores de una sociedad dada donde históricamente han sido sujetos de acción.

Siguiendo esta línea se puede hablar de transformación de las "condiciones objetivas capitalistas que dan cabida a la existencia de sociedades de "clase". La pregunta a plantear de entrada es lo referente a qué tipo de "condiciones objetivas" son a las que se hace referencia. Primeramente ha de hablarse de una clase dominante, dirigente, que enarbola la bandera de la existencia de las clases sociales. La clase dirigente es una categoría social que tiene su origen en la burguesía. Precisamente ésta va a ser responsable y quien determine el tipo de relaciones y la organización social y de categorías a considerar del concepto de clase social.

La clase social se presenta en las sociedades como una realidad objetiva, innegable, inhumana y verídica. La "clase" es un concepto que más que definirlo requiere comprenderlo, comprender las relaciones que se desencadenan tras la "existencia de las condiciones capitalistas" y como consecuencia la existencia de protagonistas como el capital, el salario, obreros asalariados, medios de producción, acumulación de capital, entre otros. Sin embargo más allá de todo esto se requiere jugar con la existencia de la clase social y al mismo tiempo imaginar la posibilidad de transformar su existencia y la deshumanización que presenta.

Entonces no se puede negar la existencia de esta relación social que se presenta y experimenta como una realidad "objetiva" e innegable dentro de tiempos y espacios sociales distintos. Comprender el concepto de clase es la intención primera de este trabajo pero al mismo tiempo se pretende jugar con su inexistencia y a la par mostrar el grado de deshumanización que alcanza. Por lo tanto, es necesario partir negando que la comprensión del concepto de "clase " se inicia con una definición, clasificación que "clarifique" el tipo de relación que se entabla con los sujetos en una sociedad capitalista. En realidad es necesario resaltar las condiciones sociales en la que se presenta y la posibilidad histórica de emancipación. Una definición aumenta la complejidad del fenómeno y la relación entre los actores sociales disminuyendo la posibilidad de tener un acercamiento menos anodino. De modo que permita comprender las condiciones en que se dan la relación entre el capital y el trabajo en una sociedad capitalista regidas por relaciones y condiciones inhumanas recordando lo que Marx señalaba al respecto "el trabajo materializado aparece -como una contradicción consigo mismo, con el trabajo vivo" es decir, " es dentro del marco" de la existencia constituida (Dasein) del capital que la clase tiene efecto; el marco en sí parece existir externo a la lucha de clases. El trabajo asalariado es una contradicción en sí mismo sólo es posible su existencia dentro del marco capitalista y de igual forma la clase también podrá mostrar su constitución.

Entonces, es necesario partir de la existencia de la "clase social" dentro de un marco de referencia que es el sistema capitalista ( y tal vez de la misma naturaleza humana que hace presente la existencia de relaciones jerarquizadas de unos sobre otros). No se puede afirmar absolutamente que la "clase" surge con el capitalismo como la violencia surge con el Estado. Pero se hace referencia a la categoría de clase, al mismo tiempo que las relaciones sociales se hacen presentes al entrar a las denominadas condiciones capitalistas. Lo realmente discutible es el tipo de relaciones y condiciones capitalistas con el capital y por el capital y la acumulación de éste que lleva a oposiciones entre dichos grupos que componen el colectivo social sobre todo si se habla de intereses de clase donde una resulta ser el obstáculo de la otra. Las discrepancias surgen cuando las relaciones sociales se alcanzan a vislumbrar como naturalistas- consustanciales a la existencia humana- además de históricas (Bonefeld, 1995). Repetibles en espacios y tiempos diferentes, producto de las acciones humanas, pero al mismo tiempo capaces de ser transformadas y modificables por el mismo humano. Esta es la primera referencia al hablar de clase como concepto real, pero que al definirlo no parece mostrar toda la complejidad y el génesis y la transformación del fenómeno humano de clase.

Según Marx la división social en clases constituyen un antagonismo en sí mismo, abordando la clase social en relación con los bienes de producción en el marco capitalista, como las feministas hablan de la división social en relación directa con el sexo, y los racistas en función de la diferencia entre las razas o como el consumidor en función de lo que se consume, de igual forma la clase social se define en función de su relación con los medios de producción. Al parecer resulta un tanto complejo definir lo humano en torno a la diferencia de clase, raza, género y medios de producción cuando éstos precisamente responden a divisiones sociales y relaciones jerarquizadas. Ejemplo de ello lo encontramos en la manera en que definen el capitalismo a la "clase obrera" en términos de un ingreso, un salario, etc, que origina un número infinito de categorías inmanejables y en muchas ocasiones incomprensibles. Es decir al parecer cada ocupación, color, sexo, pensamiento constituirá su propio grupo o clase que es dividido en varias subgrupos para acercarse a sus especificidades de sus características en torno a sus funciones y al rol social de cada categoría haciéndolo cada vez más complejo e inimaginable. Una vez incursionado al mundo de la clasificación y la conceptualización social se puede percatar de la dificultad que presenta intentar definir la relación de clase en función de una estratificación social..

Pero regresando al concepto de clase como un concepto sociológico y su relación directa con el capital es necesario percatarse de la perversión más desarrollada, el fetiche constituido de la sociedad capitalista, es la relación del capital consigo mismo, de una cosa en si mismo (veáse Marx, sin fecha,b,p 423). Perversión en la relación de clase y en la búsqueda desenfrenada de la acumulación de capital en manos de una clase a costa de la explotación de la "clase obrera" en términos de su posición económica en el proceso de producción y en el mercado laboral frente a las condicionas burguesa –capitalistas.

De esta forma lo que se pretende es analizar el concepto de clase en términos de Marx y en términos de la posibilidad de nombrar lo innombrable y definir lo indefinible y transformar las denominadas "condiciones objetivas" y como consecuencia la existencia de una sociedad sin clase o una sociedad con clases desprendidas de la perversión ¿ será posible esto? Definir la clase capitalista y la clase obrera por el lugar que ocupan en los medios de producción puede ser tan perverso como perverso son muchas cosas que el humano hace cotidiana e históricamente, tan es así que persigue el capitalista al capital y el obrero al mismo capital, idea burguesa y perversión de parte de la clase capitalista que lo que persigue es acumular capital y explotar al trabajador, pero que en ningún momento intenta "realmente compartir " lo alcanzado mediante la dominación y explotación a la otra; y como respuesta innegable, una "lucha de clases" históricas, pero tras la perversión de la división de la sociedad en más de dos clases el antagonismo del capital permea a los demás sujetos sociales construyendo una idea de la acumulación de capital a través de la explotación y subordinación de las relaciones y las condiciones del trabajo, orillando a una carrera desenfrenada por el incremento de capital en un pequeño grupo social, mientras que el trabajador asalariado y los demás estratos sociales pretenden "cachar" algo de la manzana prohibida que sólo es "privilegio"de unos cuantos internándose a los dos mundos diametralmente separados, el trabajo y los medios de producción, en las relaciones que fundamentan este sistema. Como afirma Jun (1987b) los pies del trabajador asalariado "permanecen sumergidos en el lodo de la explotación incluso cuando [su cabeza respira}en nubes ideológicas burguesas( Jun,1987a).

De esta forma se requiere internarse a categorías como trabajo, condiciones objetivas capitalistas, salario etc. Estas categorías son de orden económico y social donde el trabajo más las condiciones capitalistas, es decir el trabajo asalariado y el capital, así como el tipo de relaciones que de éstas se desprenden, va a tener un dueño único quien dicta condiciones objetivas del trabajo, y éste va a ser el capitalista , mientras que el obrero va a estar sujeto a dichas relaciones donde la posibilidad de reunir el trabajo de los medios de producción va atraer como consecuencia un tipo de relaciones más humanas, activas y menos enajenadas. Estas personificaciones del trabajo asalariado y el capital están determinando un tipo de relación social y económica desiguales una vez inmersos en el proceso de producción. Incrementando la "masa del material humano explotado" enfatizado en el obrero como un sujeto al que se somete a explotación sobre y por encima del mismo. Las condiciones objetivas capitalistas no estarían dadas por una clase y de una clase a otra, sino más bien dicha acumulación originaria no sería el fundamento de la reproducción capitalista y que precisamente crearía el concepto de clase, si esto puede ser posible.

De este modo las denominadas condiciones objetivas capitalistas es un conjunto de condiciones de una clase sobre otra de modo que permita la acumulación progresiva que lleva a producir por producir e incrementar la acumulación para los capitalistas y la explotación y disminución de conciencia y bienestar económico de los demás. Precisamente esto es lo que dificulta la comprensión del concepto, mediante una definición de esta categoría (donde todo suena tan confuso y demasiado imperfecto para ser real) se puede englobar las personificaciones, condiciones, contradicciones de una sociedad en el ámbito económico y social en una clasificación y división de clases que lleve a una estratificación social separando en términos económicos el trabajo de sus medios y describir más que analizar los procesos y relaciones sociales antagónicas.

Por lo tanto en lo mencionado hasta el momento se vislumbra la dificultad que presenta la comprensión del concepto de "clase" como para reducirla a clasificaciones, definiciones y divisiones sociales más reductibles e interpoladas, arrastrando con ello relaciones jerarquizadas en diferentes momentos y espacios históricos sociales y donde chocan intereses y necesidades de naturaleza distinta. Como bien señala Hirsch donde las relaciones están subdivididas en grupos distintos de interés social tales como el interés económico de la clase trabajadora y el interés ecológico del ecologista. Estos "intereses" parecen chocar uno con otro, socavando la posibilidad de la solidaridad social contra lo que él acepta como el poder objetivo del capital (Hirsch,1995,12)

Es así como no podemos negar la existencia del concepto de clase y la personificación y la existencia del capitalista y del obrero tras la creación de las condiciones capitalistas, la pregunta pendiente es reflexionar ¿ desde cuándo surge la clase social como categoría económica y social? Resaltando, por supuesto al capital como término económico, siguiendo la lógica del trabajo como práctica social bajo el sistema capitalista.

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Es decir, como afirma Bonefeld, la clase social (1985) es una comprensión teórica de la totalidad de la actividad humana que constituye, envuelve y contradice el mundo pervertido de las cosas: la explotación del capitalista existe como existen las relaciones sociales capitalistas. Esto es la comprensión del fenómeno radica en no separar la totalidad de personificaciones y relaciones que se encuentran en movimiento y tienen una constitución histórica, social y económica. En términos de Marx por más pervertida que sea, existe la práctica social pervertida del ser humano real, pero que además todo este juego pervertido responde a constantes luchas, contradicciones e intereses burgueses. Esto es, la clase social también puede ser susceptible de definirse en torno a sus diferencias e intereses, incluso su misma oposición y lucha.

Y en términos de Bonefeld (1995) la personificación {clase social} es la clase obrera donde la parcelización del trabajo es el asesinato de un pueblo" (Marx, 1987,a,p, 296) convirtiéndose en engranajes de una maquinaria aún superior. Comparativamente hablando la división social del trabajo es comparable a la fragmentación de la solidaridad humana convirtiéndola en una actividad inhumana y separada de la naturaleza y del mismo hombre. Entonces, si el capital depende de la alienación de lo productores, ¿qué pasaría si dicha dependencia se rompe?. Al romperse se rompería el poder productivo del mismo y ya no se incrementaría la loca carrera por el capital y como consecuencia dejaría de convertirse en una acumulación progresiva del capitalista. Aunque si bien es cierto que la constante lucha de clases y las constantes crisis que invaden a la humanidad se están acercando lenta y progresivamente a los límites sociales con la constante explotación del trabajo ÿ de la misma naturaleza y de la humanidad por parte del capital. Aunque también es cierto que las constantes crisis económicas de los países tercermundistas demuestran la necesidad de disminuir y frenar el trabajo y las condiciones desventajosas del capital en el mundo capitalista. Es por ello que el trabajo presenta más cercanía a ser una categoría social más que económica. Incluido su relación directa con el concepto de clase como una actividad dinámica en donde lo que marca y demarca su existencia es la separación práctica humana de sus condiciones (Bonefeld,2001).

A MANERA DE CONCLUSIÓN

Hasta el momento se han señalado la importancia de abordar el concepto de clase social, desde una visión crítica que no parte de una definición de concepto, sino de las relaciones de clase que no aterrizan en una estratificación sino en una reflexión y análisis de las categorías y relaciones que integran las condiciones capitalistas del trabajo. Es decir abordar la clase social es posible siempre y cuando no se haga abstracción de las relaciones humanas presentes en las relaciones capitalistas que permean y contradicen su propia existencia de la clase social.

Entonces el concepto de clase es de existencia social donde existe un antagonismo de clases entre capital y trabajo, en la medida que el capital separa al trabajo de sus condiciones humanas, creativas, activas y realmente productivas mediante la división de clases. Al parecer la clase social se torna pervertida y atenta contra lo humano y las relaciones humanamente posibles impregnadas de valores, pensamientos reivindicados y sentimientos profundos, poder que las clases más desfavorecidas tendrían que reivindicar para hacer de estas relaciones capitalistas diferentes de lo que son, pero como la historia lo demuestra hacer de igual forma una práctica humana que existe en sí misma, para sí misma y contra sí misma (Bonefeld,1895).