Diciembre de 2021
Campeones del greenwashingDaniel Gatti
Foto: Gerardo Iglesias
Se llama greenwashing a esas estrategias de mercadotecnia empleadas por empresas para mostrar al público cuán respetuosas son del medio ambiente. Las mayores transnacionales del mundo se han especializado en esas técnicas de lavado de cara. Sobre todo, las más contaminantes.
Ese arte del “como que” (“Yo te financio unos cursitos sobre educación ambiental, buenas prácticas respetuosas del entorno, y por atrás te contamino ríos, arroyos, aire, suelo”) ha tenido en los últimos años un desarrollo acelerado, en la medida en que los escándalos se han multiplicado y las compañías han perdido algunos juicios emblemáticos.
El diario argentino Página 12 acaba de desnudar un ejemplo algo extraño de “greenwashing” que pone en escena a dos enormes transnacionales: la FIFA, el amo del fútbol, y la compañía india UPL (United Phosphorus Ltd), dos gigantes que en principio poco tienen que ver entre sí.
El convenio, por diez años, se firmó en Zúrich el 11 de octubre, entre por una parte la Fundación FIFA, dirigida desde enero de 2020 por el ex presidente argentino Mauricio Macri, y la compañía basada en Bombay.
“Estoy muy contento de anunciar el acuerdo entre FIFA y UPL, una de las compañías de soluciones agrícolas más relevantes del mundo, para trabajar juntos en dos objetivos clave de la fundación: el desarrollo sustentable y la educación”, escribió Macri en Twitter.
“Con su experiencia”, UPL ayudaría a la FIFA a “reducir las emisiones a través de estadios más eficientes, transporte de baja emisión y gestión de residuos sustentable” y en el “manejo sustentable” de los desechos en el Mundial de Catar y otras competencias deportivas, y participaría de cursos de formación en el marco del programa “Fútbol para escuelas”.
También se asociarían para “premiar a agricultores de pequeñas tierras que adopten prácticas sustentables”.
“Esta propuesta de UPL es maravillosa, única, para movilizar a millones de pequeños agricultores de todo el mundo y, mediante el uso de la tecnología, reducir el consumo de agua, de químicos mal utilizados e incrementar la producción”, se entusiasmó Macri. La FIFA y UPL, dos estandartes del “desarrollo sostenible”.
Historial
Claro que la “realidad real” es bien distinta. Ninguna de las dos transnacionales tiene precisamente un historial de respeto del medio ambiente o de “los derechos de la gente”, como le gusta repetir al ex presidente argentino. Más bien todo lo contrario.
A UPL, por lo pronto, se la cataloga como una de las principales comercializadoras de agrotóxicos del mundo.
La empresa ha sido sancionada tanto en su país de origen, India, como en el país de origen de Macri. También en Sudáfrica.
En Argentina fue este año la sexta empresa más multada en la provincia de Buenos Aires por contaminación y mal manejo de residuos y envases de productos químicos. El Organismo Provincial de Desarrollo Sustentable la acusó de poner en peligro el medio ambiente y la salud humana.
En Brasil, UPL fue en 2020 el cuarto vendedor de agrotóxicos en un país que los consume y los autoriza a un ritmo que pocos pueden imitar. Al tiempo que coordinará el programa de educación ambiental de FIFA en 30 escuelas rurales, UPL contribuirá con sus productos a la deforestación de la Amazonia para extender la frontera sojera selva adentro.
Un poquitín contradictorio, pero así son estas cosas de la propaganda verde.
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