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Enero 2017

PELIGROSA SITUACIÓN DE DERECHOS HUMANOS EN CHILE


C I N P R O D H,
TEMUCO, Diciembre 2016


Ante la preocupante y peligrosa realidad que amenaza a los Derechos Humanos en Chile, el Centro de Investigación y Promoción de Los Derechos Humanos CINPRODH, consideramos ineludible entregar a la opinión pública nuestra opinión frente a ello.

Desde hace ya varios años, cada cierto tiempo, se reanudan las ofensivas desde diversos actores de nuestra sociedad, para conseguir amnistiar a criminales violadores de Derechos Humanos, actos deleznables cometidos durante el periodo de la dictadura cívico-militar.  

En estos últimos meses, esta campaña, ha estado potenciada por la difusión que hace de ella el duopolio comunicacional. Prensa escrita, radio y televisión, han sido usados hasta el hartazgo por diversos personeros que promueven este perdón, argumentando motivos humanitarios y esgrimiendo el estado de salud y la edad  de los condenados por delitos de lesa humanidad.

Se ha llegado al punto que desde las más altas esferas del GOBIERNO, en este caso su MINISTRO DE JUSTICIA, somos notificados de “la necesidad de tener el coraje"  para encarar esta situación de los criminales recluidos  en el penal de Punta Peuco, tratando de ponerlos en la misma situación de aquellos que han cometido delitos que tienen una connotación absolutamente diferente, o sea poniendo al violador de Derechos Humanos y crímenes de lesa humanidad, al mismo nivel del que ha cometido delitos comunes.

En esta arremetida no se han escatimado esfuerzos, y es evidente que obedece a una muy bien planificada estrategia donde confluyen actores y mensajeros variopintos.

Estamos ante un escenario muy delicado, todo indica que esta ofensiva será aun más fuerte en los próximos días, como se manifiesta en las diversas publicaciones del duopolio comunicacional, especialmente el diario el mercurio que diariamente de manera profusa en sus páginas da cabida solo aquellos que propugnan un perdón a los escasos violadores de derechos humanos que se encuentran recluidos.

Respecto a eso queremos puntualizar que de 1.375 militares, agentes de la dictadura procesados y condenados, sólo 117 de ellos cumplen penas efectivas, o sea un escaso 8,5%.

Este pequeño porcentaje de condenados no han hecho ningún reconocimiento que ayude a saber la verdad, no reconocen su actuar inhumano y tampoco piden perdón.

No estamos por la venganza, en tanto como organización de Derechos Humanos, valoramos la vida humana, sin excepciones en toda su expresión y creemos que el ESTADO debe proporcionar todos los medios para que la permanencia de estos criminales en prisión tenga toda la atención médica que necesitan, como igualmente las visitas de sus familiares sin vejaciones ni maltratos.

De lo que se trata en el fondo, es que la experiencia traumática vivida por nuestro país, que se traduce en la violación sistemática y masiva de los derechos humanos, durante los 17 años de la dictadura cívico-militar, con torturas, ejecuciones sumarias, desapariciones forzadas realizadas por agentes del estado nunca más vuelvan a suceder.

Para ello entonces debe haber un castigo social acorde con el masivo daño causado.

Si el ESTADO muestra debilidad respecto a la aplicación de la ley y no cumple con los tratados internacionales firmados respecto a los crímenes de lesa humanidad, sería una muy negativa señal que se estaría emitiendo a la sociedad toda, quedando expuestos a que estos hechos deleznables puedan volver a ocurrir en el país.

Hacemos un llamado a las organizaciones sociales, de Derechos Humanos y a todas las personas sensibles a esta grave situación a pronunciarse y permanecer alertas ante esta nueva escalada.


C I N P R O D H,
TEMUCO, Diciembre 2016



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